Siendo el tercer elemento más común de la corteza terrestre, con el paso del tiempo, el aluminio se ha consolidado como uno de los materiales más importantes del desarrollo humano y social. Esto responde a una serie de beneficios derivados directamente de sus propiedades.
¿Por qué este material?
El aluminio es un metal no ferromagnético. El metal se extrae a partir de un mineral que es conocido con el nombre de bauxita. Se convierte primero en alúmina y, luego, a través del proceso Bayer, llega a ser aluminio metálico mediante electrólisis.
El aluminio fue aislado por primera vez en el año 1825. Fue el físico danés H. C. Oersted quien llevaría a cabo su descubrimiento, iniciando una importante tradición que llegaría a nuestros días. Hoy, el aluminio es parte fundamental de la vida de las sociedades, apareciendo en todos los ámbitos de la vida y el desarrollo humano.
¿Cuáles son sus propiedades?
Son las propiedades del aluminio las que lo han convertido en uno de los metales más importantes en el mundo. Su uso se extiende a lo largo y ancho del planeta debido a sus beneficios. A continuación, te contamos cuáles son esas propiedades.
1. Es un gran conductor
El aluminio se destaca especialmente por ser un excelente conductor, tanto de electricidad como de calor. Incluso, en relación a su peso, llega a ser mejor conductor que el cobre, famoso para estas tareas.
2. Es ligero
El aluminio es uno de los metales más ligeros que existe. Su peso llega a ser de un tercio que el acero. Sin embargo, eso no lo hace perder su resistencia.
3. Es resistente
Siguiendo esta línea, la resistencia del aluminio es fácilmente modificable a partir de la composición de su aleación.
El aluminio genera una capa de óxido, de forma natural, que lo protege contra la corrosión. A partir de diferentes tratamientos, esta protección puede incluso mejorarse. Es esto lo que hace al aluminio un metal altamente utilizado en la industria de la construcción, ya que puede ser tan resistente como los metales de referencia. Hoy, ha llegado a convertirse en uno de ellos.
4. Es reflector
Además de conductor, el aluminio es un excelente reflector, tanto del calor como de la luz. Esta característica es la que lo ha introducido en reflectores, en bombillas, en tubos fluorescentes, entre otras múltiples opciones.
5. Es dúctil
Con densidad y punto de fusión bajos, el aluminio es sumamente dúctil. Esto permite que los productos de este material se fabriquen en una fase muy próxima al diseño final.
6. Es maleable
Con poco esfuerzo, el aluminio puede formar prácticamente cualquier producto pensado. Esto se debe a que posee altos niveles de formabilidad y maleabilidad.
7. Es reciclable
A diferencia de otros materiales, el aluminio es completamente reciclable, en un 100%. Su recuperación una vez superada la vida útil de un producto fabricado con ese material es un proceso sencillo que no requiere de grandes esfuerzos. Sólo se requiere cerca del 5% de la energía empleada en la fabricación del metal inicial para su reciclado.
Propiedades adecuadas para la construcción
Debido a lo mencionado con anterioridad, el aluminio se ha convertido en uno de los materiales de referencia para la industria de la construcción. En la actualidad, podemos verlo tanto en estructuras internas de casas y edificios, como en elementos ornamentales. Ello responde a las siguientes ventajas:
- Su ligereza y maleabilidad facilitan los procesos de trabajo con aluminio. Los trabajadores de la construcción pueden llevar a cabo más fácilmente sus tareas.
- Su durabilidad, resistencia a la corrosión y larga vida útil lo vuelven ideal para las estructuras y para toda construcción en ambientes exteriores.
- Por su color y, nuevamente, a su maleabilidad, las posibilidades estéticas del aluminio para fines ornamentales son prácticamente infinitas.
- Los niveles de recuperación del aluminio en el ámbito de la construcción son muy altos, lo que responde a su potencial reciclable.
El proceso de anodizado
Las técnicas de anodizado han evolucionado mucho a medida que fue pasando el tiempo y con el incremento de la competencia en los mercados. Por eso, actualmente podemos encontrar incluso una capa de óxido de aluminio con color gris atractivo que es propio de este óxido, pero también otras coloraciones posteriores a la formación de la capa, como pueden ser el color oro, el bronce, el negro y hasta el rojo. También hay técnicas recientes que se basan en procesos de interferencia óptica y que pueden proporcionar acabados tales como el gris perla, el verde y el azul.
Existen diferentes métodos de coloración de las capas de óxido formadas. Hay coloración por tintes y por sales. La de sales es la alternativa más habitual y la que mayor calidad presenta en los acabados, con mejor durabilidad también. Las técnicas de interferencia basadas en modificaciones posteriores del poro del óxido de aluminio formado en la etapa propia del anodizado constituyen una modificación microscópica del poro. Esta se consigue a través de la reproducción de condiciones de temperatura, voltajes, concentraciones de electrólito, superficie de carga afectada y, también, características de la aleación.
El control de estas variables, como así también la reproductibilidad de las condiciones del proceso son las que van a determinar el acabado gris, verde o de color azul. No obstante, en el caso de las aberturas de aluminio, el color que se usa con más frecuencia es el gris.
¿Por qué anodizado?
Como decíamos con anterioridad, se puede definir al anodizado como un oxidado artificial. Este tiene como fin principal poder ofrecer una mayor protección al aluminio. Esto lo protege no solamente del desgaste natural que tienen otros materiales, sino también de las condiciones climáticas adversas, entre otras posibilidades. la posibilidad de realizar este procedimiento también hace a que el aluminio sea uno de los materiales por excelencia a la hora de elegir aberturas, debido a que son elementos que suelen estar en contacto con el viento, el agua y la tierra, por lo que deben estar hechas en un material que sea resistente. Podemos decir entonces que el aluminio es, por lejos, uno de los materiales más durables que se puede tener, especialmente si se realiza en él el anodizado natural.
Consejos para la eficiencia energética
Si estás preocupado por los gastos que suponen los cambios de estación en el hogar y no sabés cómo ahorrar energía, a continuación te vamos a dar algunos consejos que pueden ser de gran utilidad.
Esperar para el aire acondicionado
Cuando se empieza a dar los primeros pasos en los meses de verano, es importante buscar maneras de ahorrar en la factura de la luz. Una de las mejores maneras de hacerlo es buscando no apurarse en el encendido del aire acondicionado. Primero, es importante agotar otras instancias para refrescar el ambiente, dejando que el aire se prenda lo más tarde posible. Una buena manera de hacerlo es ventilando los espacios, colocando un pequeño ventilador en un área estratégica de la casa y guardando la ropa de cama abrigada para la próxima temporada.
Adaptar la iluminación artificial
Hoy en día, hay muchas alternativas para adecuar la iluminación artificial y dejar de gastar de más. Si todavía tenés en la casa las bombillas tradicionales, es importante hacer el esfuerzo de cambiarlas por luces LED. Así se va a conseguir un mayor ahorro en electricidad, a la vez que son más duraderas, por lo que también se va a ahorrar dinero en la compra de nuevas bombillas.
Desenchufar los dispositivos electrónicos
Mantener los aparatos enchufados, aunque puedan estar apagados y fuera de uso, consume también energía, aumentando el gasto en la boleta final de la luz. Por eso, se recomienda mantener los electrodomésticos desenchufados cuando no se los está utilizando, por ejemplo, durante la noche o cuando se sale del hogar.
Revisar las instalaciones del hogar
Es importante mantener un control y mantenimiento de las instalaciones de la vivienda al menos una vez al año. Se trata de repasar desagües, cañerías y otros conductos por los que se pueda filtrar la lluvia, el frío, la humedad, entre otros factores. Además, es importante limpiar los filtros del aire acondicionado y purgar los radiadores para que el polvo no impida la transmisión de calor y no genere el mismo gasto por menos energía.
¿Qué aplicaciones tiene el aluminio en la construcción?
Lo primero que hay que decir al respecto es que es tal el desarrollo que este material está teniendo en la actualidad, que sus aplicaciones en los distintos ámbitos se amplían considerablemente todo el tiempo. De todos modos, en la actualidad, en lo que respecta al campo de la construcción, el aluminio se usa especialmente en todo lo que tiene que ver con aberturas, ventanas, puertas, rejas, ventanas corredizas, como así también en marcos, escaleras, barandas, laminados, barras, tubos, entre otros. También suele aparecer en perfiles de industriales y en perfiles de tabiquería.
¿Se puede usar en techos?
Por el momento, el aluminio se ha empleado en sistemas de techado solamente en los casos de estructuras especiales. De todos modos, existe hoy en el mercado una muy amplia gama de paneles y de perfiles de aluminio que pueden diseñarse para irse adaptando paulatinamente a los requisitos que pueda implicar casi cualquier proyecto. Por esto, la aplicación del aluminio en techados no es algo que se observe con frecuencia hoy en día, pero sí se estima que puede aplicarse pronto.
¿Por qué el aluminio?
Porque las propias características y las propiedades del aluminio como material han ido llevando, a lo largo del tiempo, a muy importantes innovaciones en técnicas de construcción. Por eso, además de por los beneficios que trae consigo, se considera que el aluminio es un material revolucionario en lo que refiere a los proyectos de arquitectura y de ingeniería modernos.
Se estima que el aluminio será uno de los materiales más importantes en el futuro de estos dos campos: la arquitectura y la ingeniería. Esto es por sus propiedades, de ser un material de bajo peso, de alta resistencia a la corrosión, de baja densidad comparado con otros metales similares y altamente reciclable. Su resistencia hace que se pueda ajustar para incorporarse en cualquier tipo de proyecto y uso, a la vez que sus aplicaciones aumentan considerablemente si se utilizan las aleaciones adecuadas.
¿Se usa aluminio en los edificios?
Hoy por hoy, el aluminio tiene un gran uso en el revestimiento de edificios que no son residenciales. Hay ciertos ejemplos en distintas partes del mundo que dan cuenta de esto. Se trata de un tipo de fachadas que aumentan la durabilidad de la construcción en general, a la vez que mejoran considerablemente el aspecto estético del edificio. Pero, por si fuera poco, el hecho de generar fachadas en aluminio está tentando mucho a los constructores y diseñadores, ya que trae enormes beneficios como una mejora sustancial en el aislamiento acústico y térmico, a la vez que mejora la eficiencia energética de la totalidad de la construcción.
¿Se puede soldar?
El aluminio es un metal que se puede soldar, especialmente cuando se trata de aluminio de aleación. El uso de las láminas de aluminio es bastante común en la fabricación de paneles con poliuretano, que se emplea especialmente en la fabricación de oficinas y de casas desmontables.
¿Por qué es importante la resistencia a la corrosión?
Lo que hace la resistencia a la corrosión del aluminio es que su vida útil sea mucho más larga. Esto es especialmente importante en el ámbito de la construcción. Además, la resistencia a la corrosión del aluminio, en particular, genera durabilidad incluso en los sitios en los que nos encontramos con ambientes agresivos en cuanto a las condiciones climáticas. Por eso es un material ideal para ser colocado en zonas marinas y costeras, ya que el efecto del cloruro de sodio, que podría ser altamente perjudicial en otros metales, no genera mucho efecto en el aluminio.