En general, podemos observar que los disipadores se fabrican en aluminio. No obstante ¿sabemos por qué? Lo veremos a continuación.
Frecuentes en el mercado
Hoy en día, podemos ver disipadores con diferentes actividades. Podemos encontrarlos en muchos tipos distintos, formas y tamaños también. Los encontramos en procesadores, en tarjetas gráficas, en la memoria RAM de las computadoras, en la construcción, entre otras aplicaciones. En cada uno de los casos, los disipadores se diseñan en función de las necesidad térmicas.
En la actualidad, son tres las formas en que los disipadores se suelen fabricar:
- A partir de un bloque de un único metal extruido
- Con una base de un metal con heats pipes y con aletas de refrigeración
- A partir de un bloque de un único metal extruido, de cuyo centro es posible emplear un cilindro de otro
En el primer caso, que es además el más popular tanto por eficacia como por precio, se tiende a usar aluminio.
¿Por qué aluminio y no cobre?
Como sabemos, el cobre cuenta también con excelentes propiedades térmicas, que pueden ser similares o superiores a las del aluminio. No obstante, a diferencia del aluminio, el cobre cuenta con una serie de desventajas que deben necesariamente ser tenidas en cuenta:
- El cobre es mucho más denso que el aluminio, por lo que los disipadores que se fabriquen en ese material pueden ser mucho más pesados, reduciendo de esa manera las aplicaciones que se pueden realizar.
- Además, el cobre es mucho más caro económicamente que el aluminio; por eso, el precio final del producto generado puede ser también mucho más alto.
Cuando los disipadores son de pequeño tamaño, el peso puede no ser un problema tan grave. No obstante, cuando se trata de disipadores de tipo torre, puede acabar siendo un gran problema. Por eso, en general, se recomienda que los disipadores se produzcan en aluminio, debido a que cuenta con las mismas funciones, con excelente calidad, pero con menor peso y menor precio también.
Hoy en día, los disipadores se aplican a diferentes ámbitos y construcciones, tanto de edificios y hogares, como de electrodomésticos. Por eso, la calidad de los mismos es muy importante. Y, para ahorrar costos y poder favorecer la funcionalidad del disipador, los fabricantes están optando cada vez más por el aluminio como material base, por todos los beneficios que este tiene para ofrecer.