Cuando se piensa en hacer una apertura desde cero o cuando se empieza a tornar necesario realizar un cambio en las ventanas, hay determinados aspectos que es fundamental tener en cuenta para obtener buenos resultados. Entre estos, se incluyen el confort, la seguridad, la durabilidad, la eficiencia energética que ofrecen, entre otras cuestiones. No obstante, hay dos factores fundamentales que son los más importantes al momento de tomar esta decisión: el aislamiento acústico y el aislamiento térmico. Sin esto, una ventana no cumplirá con su deber y no proporcionará un buen rendimiento.
Logrando un buen aislamiento
Teniendo en cuenta lo dicho con anterioridad, vamos a vera continuación cómo hace una ventana para lograr el mejor aislamiento. Cabe destacar que este aspecto es importante no solamente para las viviendas, sino también para los edificios, las oficinas y todo tipo de espacio de trabajo. Hay que tener en cuenta que la contaminación sonora de las ciudades puede ocasionar graves problemas de salud para las personas, desde aturdimientos, hasta estrés, pasando por problemas para concentrarse y una reducción sustancial en su bienestar personal.
En lo que refiere al aislamiento térmico, este es clave para lograr una buena eficiencia energética. Mientras menos aislante sea la ventana, mayor será el uso requerido de aires acondicionados y de aparatos de calefacción. Por el contrario, si las aberturas son buenas aislantes, se logrará una mayor eficiencia, que derivará no solamente en un mayor bienestar para las personas, sino también en un ahorro económico al final del mes en la boleta de la luz o del gas.
En este sentido, si lo que se quiere es lograr que una ventana sea buena aislante, se debe prestar atención a los siguientes elementos.
Los vidrios
Claramente, el vidrio es clave en una ventana, por lo que su calidad no es algo que se deba pasar por alto o dejar librado al azar. El vidrio debe ser lo suficientemente bueno para proporcionar un buen aislamiento, pero dejando igualmente pasar la luz natural del Sol. La elección del vidrio adecuado es la que va a garantizar que no se produzcan pérdidas de energía por la diferencia de temperatura que puede haber, especialmente en los meses de verano y de invierno, entre el espacio interior y el exterior.
Para salvar estos problemas, se suelen recomendar dos tipos de vidrios: dobles y triples. Son vidrios de capas que permiten un mayor aislamiento, tanto para la temperatura como para el sonido, a la vez que tienden a ser más resistentes y seguros.
Los marcos
Otro espacio por el que es posible que se pierda la energía o que se filtre la temperatura del exterior es el marco. Por eso, se recomiendan en general los marcos que tienen rotura de puente térmico. Estos tienen un material no aislante integrado entre las caras de los perfiles de aluminio, lo que permite que se rompa ese puente térmico, generando un mejor aislamiento de la temperatura.
Los herrajes
Por su parte, los herrajes constituyen las piezas que refuerzan la estructura general de las ventana. Esto permite comprender el rol clave que cumplen en lo que respecta a la hermeticidad. Cuando los herrajes son débiles, las consecuencias negativas pueden ser muy importantes. De estos depende que la ventana se pueda mantener hermética y también firme, independientemente de las condiciones climáticas, como pueden ser el exceso de viento, las lluvias, los granizos, entre otras cosas.
La calidad de los herrajes, en definitiva, es la que va a determinar el comportamiento, la resistencia, la durabilidad y, claro, el aislamiento que proporciona una ventana independientemente de las condiciones climáticas que puedan darse. Claramente, cuando se vive en un lugar en el que son frecuentes los vientos fuertes o las tormentas con granizo, es importante prestar especial atención a estos elementos para que sean de la mejor calidad y, de esa manera, alcance con invertir una sola vez en ellos.
La instalación
En ocasiones, puede pasar que se haya tomado la decisión de realizar una buena inversión en el vidrio, que se elijan marcos con rotura de puente térmico y que se elijan los herrajes más resistentes del mercado, pero que esto no sea suficiente. Si la instalación general de la ventana no es la correcta, las consecuencias pueden ser graves, echando por tierra todo lo ganado con lo anterior. Por eso, es importante que la instalación sea efectuada por profesionales en el tema que presten especial atención al trabajo que realicen.