Desde la salud a la educación, desde la economía al turismo, todos los ámbitos de la vida se ven constantemente transformados y beneficiados como consecuencia de los avances tecnológicos. Estos se introducen en la vida cotidiana y generan nuevas formas de concebir todo lo que nos rodea. Claramente, el campo de la construcción no es menos proclive a estos cambios.
Hoy, la tecnología ha llevado a una nueva modernización de la construcción como la conocemos. Esto ha llevado a la introducción de nuevos materiales, mucho más eficientes, duraderos y eficaces. Es en este sentido que el aluminio comienza a ganar cada vez más protagonismo, convirtiéndose en un elemento clave para los proyectos arquitectónicos de la actualidad.
Con los nuevos avances, las fachadas de aluminio se han ido imponiendo en el campo de la construcción. Son vistas como una verdadera solución integral a todas las distintas dificultades que se han ido experimentando en el diseño a lo largo de los años recientes. Las fachadas de aluminio constituyen una nueva generación en el diseño de edificios y viviendas. Se genera de este modo un entramado que busca dar respuesta tanto a las necesidades constructivas como a las necesidades estéticas que se despliegan hoy en día.
¿Por qué perfilería de aluminio?
Mucho sabemos ya acerca de las virtudes y los beneficios de elegir el aluminio. Es un material altamente resistente a la corrosión y al desgaste, tanto del tiempo como de los factores externos. Además, tiene de los mejores acabados estéticos que se pueden encontrar en este campo. Es un material maleable y ligero para maniobrar, pero sin perder por eso su resistencia.
En la actualidad, podemos encontrar un muy importante abanico de opciones en lo que a perfilería de aluminio refiere. Se pueden encontrar distintos tipos, tamaños y formas de perfiles, para todos los gustos y para todas las necesidades. Los perfiles de aluminio ofrecen la posibilidad de resolver y de llevar a cabo todo tipo de fachadas, independientemente de sus requerimientos específicos en cada caso. Desde fachadas con inclinación hasta fachadas en rincón, otras en esquina a 90°, fachadas verticales, fachadas poligonales, entre tantas otras. De hecho, es posible resolver también módulos que tienen vidrios de gran peso. Se puede decir que prácticamente no existen opciones o demandas que sean insalvables para este tipo de material.
Resolver problemas con las fachadas de aluminio
El sistema Stick es uno de los más conocidos y más tradicionales en este campo. En este, el vidrio se fija a los perfiles de aluminio a través de un perfil presor continuo. Este se fija a un portatornillos por el exterior. En general, la unión del vidrio se lleva adelante en cuatro puntos, donde luego se dispondrán gomas para evitar que se produzca un contacto directo entre el metal y el vidrio. Además, se puede adoptar, para cubrir elementos de montaje, soluciones perfectamente estéticas.
Las fachadas de aluminio poseen excelentes prestaciones térmicas y acústicas, que otros materiales no son capaces de ofrecer. Esto se debe a una muy amplia capacidad de colocación de cristales diversos, como así también a condiciones especiales como es el caso de la rotura de puente térmico. Por otro lado, hay que mencionar que, en el caso de las fachadas, son importantes especialmente los acabados estéticos que el aluminio es capaz de generar en cualquier caso, satisfaciendo las necesidades y las demandas de cada proyecto arquitectónico en particular. El aluminio es el material con el cual la calidad y la belleza no necesariamente tienen que ir por separado. Además, es importante mencionar que con el aluminio es posible encontrar distintos tipos de lacados, como así también anodizado para personalizar el diseño con acceso a una gama de colores casi ilimitada.
Por lo mencionado con anterioridad, las fachadas cada vez más se fabrican en aluminio. Este material se ha ido convirtiendo en una de las más grandes estrellas en el campo de la construcción, por lo que no debe ser subestimado. El aluminio no solamente resuelve cuestiones estéticas, sino que, además, genera formaciones de muy alta calidad y durabilidad, con un abanico de formas posibles ilimitado, gracias a su maleabilidad.